Trabajo del taller de Literatura y Filosofia
Comentario de texto-estrofa filosofico
El sonido que habito
Escrito literario o ensayo filosofico
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Autobiografía relacionada con la muerte
Comentario de texto-estrofa filosofico
El sonido que habito
Escrito literario o ensayo filosofico
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Autobiografía relacionada con la muerte
Rubén De la Calle Quiralte – 1ºBach
Hay momentos en los que no te lo esperas pero puede ser que
en el menos esperado llegue tu momento... algo así me ocurrió o mejor dicho me
estuvo a punto de ocurrir.
Fue hace ya un año mas o menos cuando iba en bicicleta desde
casa de mi prima a la mía, por un calle poco transitada como la gran mayoría de
mi pueblo, era un día de otoño no muy frio aun y alrededor de las 7 de la
tarde, comenzaba a anochecer pero había suficiente luz y yo no me esperaba que
ese día me ocurriría algo que me aria replantearme la vida tal y como es.
Pedaleaba yo con la mirada al frente sin prever lo que
ocurriría en esa misma calle, vi una fila de 3 coches que se dirigían en
sentido contrario al mio, cuando llegue a estar en paralelo con el primero este
siguió hacia adelante y el que le seguía se detuvo por que iba a girar a la
calle en la que yo pasaba en ese momento, la mujer que conducía el coche me
hizo entender parando que pasara y es algo que ella misma mas tarde me
confirmo, en el momento en el que estaba pasando por esa zona de esquina a
esquina ella acelero bruscamente y giro hacia mi, yo sin mas tiempo para pensar
o quitarme intente acelerar pero no me dio tiempo y al notar el contacto del
faro delantero del coche tuve que sacar fuerzas y valor, e impulsándome en los
pedales y poniéndome en pie salte de la bicicleta pasando por encima al coche y
sintiendo una sensación de tensión y de estar mas vivo que nunca, caí
afortunadamente junto a un bordillo sin tener contacto y cayendo lateralmente
con el cuerpo.
Tarde muy poco en reaccionar después de la caída, de darme
cuenta de que había estado a punto de perder la vida, me levante y comencé a
insultar gritando a la conductora del coche sin pensar en si lo había echo
aposta o sin querer, ella se bajo del coche dejando en mitad de la calle y
dirigiéndose a mi muy preocupada me pregunto por mi estado, a la vez que el
coche que seguía a este estaba ocupado por un hombre calvo que se bajo y me preguntaba
también por mi estado y me ofrecía llevarme al servicio de urgencias del
medico, yo les respondí que estaba bien y continúe insultando y recriminando a
la conductora ya anciana, me acabe calmando y me acabe yendo tras una larga
conversación muy tensa.
Durante esos 7 minutos más o menos que duró la continuación
de mi transcurso fui más atento al tráfico y a todo mí alrededor, más precavido
pero también me sentía mas unido a la vida que nunca...
Quizás todos necesitamos que nos ocurra algo así para darnos
cuenta de lo que somos.
